7.2.2012
¿Cuántos tipos de madres hay? ¿Cuántas características nos definen a cada una? Hace días que pienso en ello… Hace días que pienso que hay muchos rasgos que compartimos en mayor o menor grado, la mayoría de madres. Otros no, en absoluto, y eso nos hace particulares a cada una de nosotras. Hay tantas madres, tantas, que no me cabrán en este post…
La madre sufridora consciente, que sabe que algún día tiene que hacer algo en eso de sufrir tanto, y la que hace ver que pasa, pero que en realidad, sufre un montón sin decírselo a nadie porque siempre ha detestado que su madre sufriera por ella. La que lo quiere controlar todo y que se va de casa dando mil instrucciones a todos para que nada, en su ausencia, falle. Y la que es consciente de que no controla nada y que hay mil cosas que se le escapan y ya ni lo intenta porque sabe que es imposible. Quiere relajarse pero en el fondo, le da rabia que las madres, que queremos tanto a nuestr@s hij@s, no podamos evitarles enfermedades, disgustos y otros obstáculos de la vida. La madre vocacional, la que con diez años ya decía que de mayor quería tener hijos y la que ha dicho siempre que no los tendría hasta que, de repente, vio que o los tenía ahora o ya no podría. Entonces cambió de parecer y sin estar convencida pasó por todas las etapas hasta tener en brazos a un bebé que le dio la vuelta a su vida. La madre que estaba segurísima que con un hijo sería feliz y ahora, que lo tiene, se pregunta qué es lo que falla porque ella, de feliz, sigue sin serlo. La madre que se quedó embarazada por sorpresa, después de una noche de no pensar demasiado y que, ahora que el hijo ya camina, cree que si no hubiera sido así, quizás nunca habría encontrado el momento perfecto para ir a buscarlo. La madre que espera a que todo encaje; tener pareja estable, trabajo estable, vivienda estable… y que no se da cuenta de que ahora de estable ya no hay nada, y que o se tira a la piscina sin mirar mucho si hay agua, o no se bañará nunca. La madre que lo de la piscina no le importa y hace años que se puso a buscar un hijo con su compañero pero no se queda embarazada. Han visto médicos y todo el mundo les dice que todo está bien. No entiende qué pasa y se decepciona un poco más cada mes que pasa. La madre que debe pasar por un proceso de reproducción asistida y se hormona, y reza cada noche para que esta vez sea la última y que finalmente todo esto que está haciendo para tener un hij@, termine siendo un éxito. La madre lesbiana que se embaraza de un desconocido, y la que lo hace de un amigo. La madre heterosexual que no tiene pareja, ni ganas, y que decide irse a otro país a buscar a un hij@ que espera desde hace años en un orfanato que alguien le ame. La madre a quien hace muchísimo le dieron la fotografía de su hij@ que la espera en Etiopía pero a quien nunca llaman para que lo vaya a conocer. La madre que después de un aborto espontáneo que la dejó KO finalmente ha superado el duelo y ahora vuelve a estar embarazada. La madre que en pleno postparto pasa todo el día sola porque el compañero trabaja mucho y lejos y llega tarde y cansado, y la madre que tiene la suerte de tenerlo un mes y medio entero con ella porque se ha podido juntar paternidad y vacaciones para disfrutar de esta llegada de un hij@. La madre que tiene diez mil libros de crianza en casa y la que nunca leerá ninguno porque hace caso de su instinto y se fía de él. La madre que se deja influenciar por lo que le dicen familia y amigos, y la que los quiere tener bien lejos para no perderse en el mar de consejos que siempre le dan. La madre que siempre va arreglada, la que ya no tiene barriga, y está más guapa que nunca, y la que no encuentra nunca tiempo para ir a la peluquería, a depilarse y hay días que ni siquiera puede ducharse. La que se siente gorda y fea, y la que esto ya ni le importa porque todo ha tomado otra dimensión desde que es madre. La que daría la vida por su hijo desde el minuto 1 de abrazarlo, y la que tarda unos meses en sentirse vinculada. La que tiene que volver a trabajar después de 16 semanas y la que opta por tomarse un año o dos para estar con este hij@ que tanto la reclama. La que se lo pasa fatal cuando tiene que salir de casa, y la que marcharse la ayuda a airearse y a coger energías para afrontar lo que le queda de día con aquel bebé. La que repite maternidad en cuanto ve que su hij@ ya camina y la que aún no sabe si tendrá suficiente energía para subir a dos. La que se siente mala madre y se juzga y se culpabiliza, y la que se siente mala madre a ratos y no le da demasiada importancia porque sabe que pasará y que en el fondo, no lo es, de mala madre. La que le cae el pelo a puñados, la que tiene la regla a los tres meses de parir, la que no le vuelve hasta después de dos años, la que llora todo el día porque no se adapta a la nueva vida y a tanta demanda, y la que es feliz y se le ve en la cara…
Hay tantas… Somos tantas… Tan distintas y tan iguales a la vez, como mínimo en un aspecto: casi a todas las madres del mundo nos une algo por encima de todo lo demás: el amor profundo a nuestros hij@s. Y eso nos da fuerza, y eso nos hace una.
17 respuestas
Me encanta!! Qué buena energía! Me gustan todas, todas hacen lo mejor que saben!
Sin duda! Besos.
Que entrada con más buen rollo!!! Me ha encantado!!! Hay tantos tipos de madres como madres hay, igual que no hay dos niños igiales, no hay dos madres iguales… Cada una con sus cosas, sus ideas, sus miedos, sus maravillosas cualidades pero todas aman a sus hijos por encima de todo… Un besito guapa!!
Gracias Maria… qué bien que te haya gustado! Es verdad, no hay dos de iguales, por mucho que busques y busques! 😉
Besos.
M’ha encantat!!!!!!!
Tants caps, tants barrets. Tants tipus de mares com mares hi ha al món però, com molt be dius tu, ens uneix una sola cosa, la més important, l’amor infinit envers els nostres fills.
Molts petons,
Anna
És maco quan hi penses oi?
Petons
A mi també m’ha encantat aquesta entrada 🙂 no te’n deixes, cap, crec, de tipus de mare, què maco. Preciós. Emotiu. Reflexiu.
una entrada preciosa
Sí que me n’he deixat: la mare poruga, la que l’abriga massa, la que l’abriga massa poc, la que pensava que indria 3 fills i ara amb un diu que no ho veu clar. La que deia que com a molt un i ja va pel tercer. La que va al ginecòleg i li diu que en vénen dos, la mare que al cap d’un any de ser-ho li diagnostiquen un càncer, la que té pànic a morir-se, la que no pot suportar els seus pares i la, si pugués, els indria vivint a 50 metres… I podria continuar perquè n’hi ha tantes… I m’encanta imaginar-me-les a totes!
Petons
Ostres, és veritat… i tantes més que hi deu haver. És genial que puguis pensar en totes. I potser fins i tot n’hi ha que tenim una mica de cada mare de les que has nomenat
Haydee: las mías son lágrimas pre-parto, y también cuesta contenerlas con este contenido, y estos temas, que no escribe Míriam.
Míriam: amb tant de diàleg que produeixen els teus posts, potser podries crear també un foro, t’ho has pensat?
petons
Maravilloso lo distintas y, al mismo tiempo, iguales que podemos ser!! Que vivan las madres!!!
VIVA!!! 😉
creo que debería dejar de leerte porque no hay día que no llore, serán las hormonas y el postparto que aún me tienen alterada?
No! Venga, esta semana prometo colgar un post k no te haga llorar 😉 besos animosos.
Me encanto! Tan distintas y tan parecidas a la vez…Gracias Miriam por escribir como lo haces. Que vivan las madres!
Gracias, Bren! Sí, que vivan las madres!!! 😉
Esta entrada la disfrute muchísimo! me vi retratada en muchas de esas madres, también encontré a mi mamá, a mi abuela a mis tias, mis amigas que son madres… están todas allí. Leerte es un placer!
Gracias Carlota! Somos tantas…! Besos