Resulta tentador: tener una frase que sabes sí o sí, que va a causar su efecto de la forma más rápida. Saber que cuando tu hijo hace algo que no te gusta o que no debe hacer, con sólo decir esta frase mágica dejará de hacerlo.
¿Cuándo empezó a hacerse eso? ¿Cuántas generaciones han escuchado estas frases: si no te portas bien, no te traerán nada, los Reyes lo ven todo, dime, has sido bueno? ¿Cuántas personas las han dicho con la mejor de las intenciones sin ni siquiera dudar de si eran frases adecuadas o no?
Es tan tentador… tener unos días al año que sabes que una sola frase acabará con aquél comportamiento que te desagrada. Y sin rechistar. Sin explicar, sin negociar, sin pactar,… sin nada.
Estoy convencida que muchos creen que no hay nada malo en ello. Tan integrado lo tenemos, tanto lo hemos vivido, tanto lo hemos mamado, que acabamos chantajeando a nuestros hijos.
Muy probablemente personas que creen firmemente en la crianza respetuosa incluso han dicho alguna de estas frases. Personas que no chantajearían jamás a sus hijos, cuando llegan estas fechas el piloto automático se dispara y se encuentran diciendo este tipo de cosas a sus hijos.
Que pase esto nos da una idea de lo mucho que se ha hecho (y se hace) esto a los niños: chantajearlos por Navidad.
Quizás lo has hecho alguna vez. Sería fácil porque estoy casi convencida que quien más quien menos ha sido chantajeado siendo niño, y por lo tanto, es un patrón que tenemos más que interiorizado.
Bueno, lo hecho, hecho está. Pero a partir de ahora, por favor, procura no hacerlo más porque…
Chantajear a los niños (con lo que sea, no sólo lo de los Reyes magos) es faltarles al respeto.
Es mentirles, porque es muy probable que los regalos estén ya más que listos o porque a la hora de la verdad, van a recibir los mismos. Y porque los regalos se los das tú, aunque él quizás no lo sepa.
Cuando chantajeamos, estamos cayendo en el recurso fácil: por falta de herramientas, por falta de recursos, de paciencia, por pereza o por agotamiento, da igual.
Pero ¿de verdad queremos transmitirle a nuestro hijo todo esto? ¿Que no tenemos herramientas, que nos faltan recursos, o paciencia o que nos da pereza educarle o que estamos tan cansados que no podemos explicarle las cosas de otra forma? ¿Queremos mostrarnos así ante nuestro hijo?
Pero hay más…
El miedo. Cuando chantajeamos a nuestros hijos de esta forma, queremos conseguir algo infringiendo miedo. Miedo a que no tendrán regalos en Navidad. Nosotros, los padres, no deberíamos de instalar el miedo en nuestros hijos, sino confianza.
Pero es que además, les estamos diciendo que dejen de hacer aquello que no nos gusta, o que no deben hacer, no porque sea algo que, por ejemplo, molesta a los que están con él (imagino un restaurante con un niño molestando los de la mesa de al lado), sino porque no va a tener regalos.
Esto no es educar. Esto es meter el miedo a nuestro hijo con una mentira para conseguir, rápido, que deje de comportarse de esa forma.
Pero, a pesar de ser seguramente efectiva, no fomenta ni la empatía hacia el resto de personas, ni la comprensión de por qué no deben hacer tal cosa, ni damos tampoco la información correcta de lo que esperamos de él en cada situación y por qué.
El niño, por lo tanto, no aprende nada.
Sólo que si no hace lo que le dicen, se quedará sin regalos y esto es algo que le da miedo. Por lo tanto, es el miedo lo que hace que se comporte de otra forma, no el haber entendido que, por ejemplo, no puede pegar al niño que tiene al lado.
Y todavía pasa otra cosa cuando chantajeamos a nuestros hijos con ese tipo de frases de que papa noel no va a venir o que los reyes magos no le traerán lo que ha pedido: abusamos de nuestra posición de poder. Y de su confianza en nosotros.
Sí, es un recurso que a partir de noviembre suele ser bastante utilizado pero a partir del 7 de enero… ¿qué va a pasar? Seguiremos faltos de herramientas y paciencia, y la frase no nos servirá porque faltará tanto para las próximas Navidades que no va a colar.
Pero para mi, lo peor de estas frases es que denotan amor condicionado.
Tendrás lo que quieres si haces lo que yo quiero o digo. Tendrás lo que pides si te comportas como yo quiero o digo, independientemente de que quizás, no estés todavía preparado para comportarte así. O que no entiendas todavía lo que te pido.
Y todo esto nos lleva al escalón siguiente: Te amo si te portas bien. Te quiero siempre y cuando hagas lo que yo digo. Los demás te amarán si haces lo que quieren.
Consecuencias de ello: no tengo el amor de mis padres garantizado, por lo tanto, debo luchar por él. Si no puedo hacer lo que me piden porque no estoy maduro para ello, el no satisfacer sus expectativas me hace bajar mi autoestima y me siento mal conmigo mismo por defraudarles.
Tener hijos es más o menos fácil… lo difícil es criarlos y educarlos. Dedicarles tiempo y paciencia explicándoles, si hace falta mil veces, cada cosa que necesiten mientras les acompañamos en su crecimiento.
Es cansado, a veces, agotador, diría yo. Pero lo otro, abusar de nuestra posición, chantajearles cada dos por tres metiéndoles miedo en el cuerpo es cruel.
Tenemos que dejar de hacerlo.
Porque es chantaje, extorsión, y esto está mal, muy mal.
¿Si el chantaje es algo que vemos fatal cuando hablamos de cosas de adultos, por qué no lo vemos tan mal cuando hablamos de niños?
Es lo de la doble vara de medir, otra vez. En adultos todo lo vemos más importante, más grave, más… todo. En niños todo es trivializado, no tomado en serio, menospreciado. Lo de siempre.
Tenemos que dejar de hacerlo. Es urgente. Por respeto a ellos y por respeto a nosotros que quizás, también fuimos niños chantajeados y (estoy segura), no nos gustó.
Ya sabéis: no hagas a los demás lo que no te gustaría que te hicieran a ti.
La Navidad es ilusión, es fantasía, es magia… un mundo donde ellos se sienten como pez en el agua. Este es SU mundo, el mundo de magia. No se lo fastidiemos aprovechándonos de ello. Y rompámonos más la cabeza gestionando los conflictos de forma respetuosa, desterrando para siempre estas frases de nuestra vida!
No, a veces no es fácil… pero todo es empezar! 🙂
24 respuestas
Home, trobo q es una mica exagerat, un xantatge una mica agafat amb pinces.
Tambe podem donar la volta i pensar q amb aquestes frases estem alimentant la il.lusio per l’arribada dels reis, son mags i et veuen i si estan contents (com estan els pares si et portes be) segur q t’ho recompensen amb un bon regal.
És un altre punt de vista. Jo quan sento que s’utilitza no és tant per alimentar la il.lusió ni pensant en fer les festes més maques pel nen sinó per aconseguir «X» cosa d’una forma ràpida i eficaç. Però segur que hi ha de tot. En tot cas, gràcies per donar la teva opinió! Una abraçada.
Totalment d’acord! Una gran reflexió que per més que sembli exagerada, l’inconscient és com ho perceb…i com tu molt ben dius será una actitud que es pot repetir cíclicament sense que ens n’adonem.
Sí, i justament per això és tan important prendre consciència del què diem i del com. I poc a poc, anar canviant la manera de comunicar-nos amb els nens… Una abraçada.
M’ha agradat molt I estic molt d’acord….el que m’agradaria,seria alguna frase,de les teves ( o vostres, si algú té una idea…) quan els familiars,els hi diuen si no et portes bé no et portaran res….. com contrarestar-ho en el moment? Doncs a mi les que em venen al cap no són afients per dir-les davant d’ells…..gràcies I Bon Nadal!
Hola Miriam,
Jo contestava alguna cosa així com «I tant que et duran coses…!» i em quedava tan ample i ja no hi afegia res més, donant per tancat el tema. Depèn de com ho dius la gent ja es dóna per aludida. Una abraçada.
Totalment d’acord. A casa sempre hem fet servir l’efecte recompensa, no l’efecte càstig, l’efecte por. En el fons és dir el mateix, però ells ho entenen com un premi si ens expressem diferent. No podem dir «si no et portes bé, els Reis no et portaran regals»; és tan fàcil com canviar-ho per «com que t’estàs portant tan bé -aprofitar el moment en què facin alguna cosa ben feta, etc.- els Reis estaran molt orgullosos de tu i segur que et portaran moltes coses». Estem dient el mateix, però hem tret el maleït «No» i hi hem afegit la paraula «orgullós». Per la resta de l’any pot funcionar igual l’efecte recompensa. I una recompensa no cal que sigui necessàriament un regal. Un simple «t’estimo molt», un petó, una abraçada, un «estic molt contenta de tu» o un «anem a fer un tomb al parc» també funcionen. M’ha encantat l’article, de debò. Bon Nadal!
Hola Natàlia,
Gràcies per prendre’t el temps d’explicar aquí quina és la vostra experiència i com ho feu a casa. Una abraçada.
A tu per l’article molt encertat, Miriam!
Totalmente de acuerdo, pero q haces cuando vas por la calle y la mayoría de la gente le dice a tus hijos. Pórtate bien q si no los reyes… me da muchísima rabia! Pero es q es a diario! Sobretodo porque mi hijo mayor es bastante revoltoso y la gente pretende «ayudar»
El caso es q a mí no me gusta nada. No solo le dicen eso, incluso, uy cuidado con el coco o el hombre del saco. Me horroriza y no se q hacer en esas situaciones (bueno si es sobre el coco le digo q no existe pero lo de los regalos me quedo callada)
El año pasado mi hijo lloraba la noche de reyes porque tenía pánico a dormir porque los reyes no iban a estar contentos con él.
Uf, pobrecito… Sí, es taaaan común que se diga esto a los niños. Pero lo primero es no decírselo nosotros y después, cuando por la calle le digan estas cosas, explicarle que los reyes sí van a traerle regalos. Metiendo miedo a los niños no se consigue nada bueno. Un abrazo.
Pero y entonces para conseguir lo que tú quieres,es decir que no sean rebeldes u ordenen.. que aconsejas?porque hablar y decir mil veces lo mismo agota..
Ya, agota, pero es lo que hay que hacer en estos casos: tener paciencia, repetir las veces que haga falta, entender que son pequeños y que lo que para ti es lógico y básico, para él no, etc. Educar es agotador, es cierto, pero es mucho mejor que meter miedo y chantajear a los hijos, sin duda. Ánimo! Un abrazo.
Hoy me paso que estaba en un consultorio con mi hija de casi 4 años, yo la llamaba Perón ella distraída no se dio cuenta y la enfermera le dice: papá Noel lo ve todo y si no te portas bien no te traerá nada y el y los reyes magos lo ven todo… mi hija se quedo de piedra porque no entendía que le decía al mujer no el por que…
Ella me miro y le dije que no tenía importancia, cuando salimos le expliqué que eso no era cierto que papá Noel se eeyes no funcionaban así, que la querían como a todos los niños por ser maravillosos pero que este tipo de cosas los adultos las decían porque en algún momento alguien les dijo eso a ellos. Y ella me responde: bueno mami de repente es que la señora si es muy mala de verdad…
Aix… qué bien que le hayas podido poner palabras a esa situación tan rara para ella. Te felicito. Un abrazo.
Uuufffff jo ho he dit alguna vegada i em sento fatal. Tinc la sensació de que ho estic fent malament i no tinc paciència. Cada dia aprenc una mica més amb tota la informació que em dónes però em costa molt posar-ho a la práctica o canviar els meus mals hàbits. Els meus fills són el millor del món i cada dia m’esforço per fer-ho bé, entendre’ls ser respetuosa … No sé si m’he explicat bé!
Gràcies de tot cor
Et recomano que miris el vídeo que vaig fer a l’estiu titulat «Crianza respetuosa: de la teoría a la práctica», espero que t’ajudi. Una abraçada.
Me parece muy exagerada tu postura. Les estamos mintiendo si les decimos q los reyes no les traerán regalos si se portan mal, pero no les mentimos si les decimos q los reyes magos existen y les van a traer regalos? Vaya por delante q soy católica y me encanta la fiesta de los reyes magos, y la disfruto con mis hijas. Pero lo q intento enseñarles es q los reyes traen regalos como «premio» por ser buenas personas.
No me parece bien q la lectura q saquen es, me porte como me porte, da lo mismo, tendré regalos!
Chantajearles??? Creo q no, lo q tienen q entender los niños, y todos, es q el buen comportamiento, en los primeros años, los buenos valores, se premian y se fomentan. Lo q no voy a fomentar es un mal comportamiento y q se quede en nada, xq los reyes siempre van a traer regalos.
Buen artículo y muy interesante. Lo único que he echado en falta es una alternativa a esa frase. Quiero decir, si alguien te comenta que estás haciendo una cosa mal esperas que también te aconseje sobre cómo mejorar o cómo relizar esa cosa bien; y es precisamente son esos consejos lo que me habría gustado encontrar.
Por todo lo demás, muy bien.
A diario están diciendo eso a mi hijo y a todos los niños, mi respuesta es que los reyes traen siempre regalos a todos los niños, porque todos los niños son buenos. Que a veces los niños son revoltosos pero que los reyes también traen regalos aunque seas revoltoso, la gente te mira raro cuando le explicas esto delante suya (que han hecho ese comentario) no sé si es buena respuesta, pero creo que se acerca bastante a la realidad
Se puede decir más alto pero no más claro! Felicidades y gracias Miriam, lo comparto!!
Gracias Raquel. Un abrazo.
Que tristeza he sentido al leer este artículo, a veces el agotamiento nos hacer decir cosas de las cuáles después en nuestro momento de paz nos arrepentimos. Este año me he retado, a mi misma para intentar ser mejor madre por así decirlo e intentar tener más paciencia y entender cada una de sus fustraciones. Por cierto aprovecho a decir que los Reyes nos traen el libro tengo un pequeño volcán Buen año y gracias por seguir ayudando con tanto amor.
Que lo disfrutéis y que os ayude a saber qué hacer con la rabia! Muchas gracias. Un abrazo.