¿Sabes por qué es importante darle las gracias a tu hijo cuando te cuente cosas que le cuestan, dolorosas o situaciones difíciles que vive? Porque abrirse ante otra persona y mostrarse vulnerable no es fácil. Cuando le agradeces la confianza en ti, reconoces su esfuerzo y además… Te permite saber lo que ocurre para que puedas ayudarle. Con su apertura puedes acompañarle y eso es bueno. Confía en ti. Hazle saber que valoras su confianza. Todo ello le hará sentirse escuchado, valorado y acompañado. Es muy probable que vuelva a confiar en ti la próxima vez que se sienta mal. Dile algo como: «No debe de haber sido fácil para ti contarme esto. Siento que lo hayas pasado mal. Te doy las gracias por confiar en mí y contármelo…Porque ahora como lo sé, puedo ayudarte y acompañarte mejor.» El impacto que tienen estas palabras es poderoso y muy positivo. Pruébalo.
Reconocer, valorar, agradecer y AMAR