Tenemos un problema
Hace tiempo que lo tengo claro, pero últimamente esta idea me viene cada vez con más fuerza. Que sí, que tenemos un problema y es con el «respeto». Nos cuesta respetar, así, en general. Empezando por nosotros mismos. Nos cuesta respetarnos: lo que queremos, lo que necesitamos, lo que sentimos, lo que el cuerpo nos pide… Y nos traicionamos un día y otro por falta de respeto a uno mismo.