Etapas
De la misma manera que conscientemente decidimos tener una hija y luego una segunda, ahora también, conscientemente, hemos decidido no tener más hijos. Sentimos que somos los que teníamos que ser, una sensación que no tuvimos después del nacimiento de nuestra primera hija porque ambos notábamos que todavía faltaba alguien. Ahora no. Ahora tenemos la certeza de que nuestra familia está completa. Y así, con esta decisión consciente fruto de un sentimiento tan sutil y a la vez profundo, me encuentro cerrando etapas.