Cuando acabas de parir y no ha sido como esperabas
Algo muy doloroso que vive una mujer cuando su parto va del revés, es que nadie, o en el mejor de los casos poquísima gente, entiende su tristeza. Los familiares y amigos que te vienen a ver pasan casi de largo y de puntillas por aquel parto donde quizás hemos vivido las situaciones más desagradables y duras de nuestra vida (o casi) y quieren que seas almenos igual de feliz que ellos cuando ven a tu bebé. Y encima de aquel sufrimiento que a veces puede haber durado muchas horas, (no sólo físico sino emocional por, por ejemplo, haber sido mal tratada por el personal que te atiende o por haber temido por la vida de tu hijo o la tuya), se añade la sensación de que nadie te entiende.