El tacto
El tacto, en este momento de mi vida, embarazada de una niña, es importantísimo. No sé si vosotros lo consideráis un sentido vital en vuestra vida o no, pero os aseguro que en la mía lo es. Siempre me ha fascinado el poder del tacto, lo que puede decir una caricia, un abrazo, el toque de una mano, un apretón, un leve contacto piel con piel… a veces tienen mucho más poder que las palabras. El tacto cura, el tacto conecta, y supongo que por eso a veces el tacto asusta. Supongo que es por este motivo que nos tocamos tan poco. A nosotros mismos y a los demás. Nos abrazamos poco. Con abrazos fugaces que duran (el otro día leí) un máximo de 3 segundos de media!