Por una adaptación escolar real
Estamos en esa época dura, porque es dura, de la adaptación de muchos niños y niñas en escuelas y guarderías. Estamos en esa época en la que, un año más, recibo bastantes correos o llamadas de madres contándome cómo va la adaptación de sus hij@s. Y siento decirlo, pero la mayoría me llaman para contarme que les va mal. Motivo: adaptaciones que NO son adaptaciones. ¿Qué puedo decirles? Que las entiendo, que es durísimo estar sufriendo viendo como no te permiten quedarte con tu hijo y hacer una buena adaptación y sobre todo, ver que socialmente e institucionalmente eso está aceptado. Que los niños lloren desesperados, ya sea en la guardería, ya sea en la escuela, está más que aceptado, incluso por los padres, muchos de los cuales lo encuentran «normal» y parte de un «proceso». Pues bien… hoy quiero decir: